[Sin Titulo]
Todo su cuerpo era hermoso. Su piel, de tonos naranjas, era flácida, llena de acumulaciones grasientas que hacían de esta un relieve montañoso que lo excitó visiblemente. Su seno derecho era pequeño, casi se confundía con el abdomen; de igual color y texturas que el resto de su cuerpo, solo el pequeño circulo negruzco en medio lograba identificarlo como lo que era.
Realmente apetecible…
En cambio, su seno izquierdo, era naranja claro, casi llegando al rosado; al contrario de su par este era redondeado y prominente, de una suavidad que carecía el resto de su cuerpo y coronado por un pezón marrón claro que se endureció ante el toque de sus garras.
–Es un defecto de nacimiento –explicó ella algo apenada-, ¿no te importa, verdad?
–En lo absoluto -respondió mientras descendía sus caricias-, siempre he tenido fascinación por lo nuevo e interesante… y pienso que tú entras en esas dos categorías.
Siguió besándola mientras ella cerraba los ojos y soltaba algunos graznidos. Se encargaría de que disfrutara esa noche; sin importar ese pequeño y único defecto.
Aún así, no pudo evitar lamer primero el lado derecho…
Lobo Gris
07/05/2009